Los vecinos luchan por el Arte Cinema
Agencia La Oreja Que Piensa. Por Silvia Del Pierro
Durante unos años el barrio de Constitución tuvo su cine en la esquina de Salta y Juan de Garay. Desde el 31 de julio de 2017 permanece cerrado pero la Asamblea de Vecines y Amigues del Cine ArteCinema, conformada unas semanas antes de esa fecha, continúan con su lucha por la reapertura.
El cine era una iniciativa privada de varios empresarios, directores, productores, relacionados con la industria cinematográfica. En un primer momento, el proyecto fracasó y cerró pero luego, en agosto 2011, en el marco de un convenio con el INCAA, este organismo oficial se hace cargo del cine en cuanto al pago de los salarios, la provisión de algunos equipos y de la programación.
En el edificio original había funcionado un Teatro de variedades que, en 1961, fue demolido. Una ley del año 1959 obligaba a que la construcción posterior incluyera una sala con butacas, es que se construye el edificio actual que albergó al ArteCinema, que contaba con 3 salas de diferentes tamaños y que, en su momento de mayor auge, alcanzó los 90 mil espectadores.
El convenio continuó hasta julio 2017, en que el INCAA lo dió por concluido. Tan pronto como se conoció el cierre, la Asamblea comenzó a realizar todo tipo de gestiones ante las autoridades de la Ciudad de Buenos Aires, la Legislatura, el INCAA, la Defensoría del Pueblo, la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, Mecenazgo CABA, la Comuna 1, entre otras.
Paralelamente, organizó festivales de música, proyecciones de películas en la puerta del cine y lugares próximos (Facultad de Cs.Sociales-UBA), semaforazos, juntada de firmas para difundir la situación.
Con ello se logró el reconocimiento y apoyo de les vecines y transeúntes porque todes sabían de la importancia de tener un bien cultural en el barrio porque, por sus precios muy populares, era accesible a todes y funcionaba como espacio de integración social ya que, cotidianamente, concurrían estudiantes, pacientes de hospitales cercanos y sus familiares, trabajadores que llegaban a la estación de trenes, personas en situación de calle, entre otres.
En la zona Sur de la Ciudad de Buenos Aires no existe una sala de cine que, además de dar cabida a una expresión artística, era un centro de irradiación de cultura y bienestar. Y pretendemos que lo siga siendo.